2001, Epic
8.5
El último trabajo en vida del Rey del Pop tiene ya 14 años. Invincible supuso la entrada de la persona más famosa de la historia en el siglo XXI, una entrada algo embarazosa y, quizás, torpe al tratar de actualizarse a la corriente electrónica de los primeros 2000, pero plagada de cortes que solo pueden llevar el sello Jackson. El disco antecesor a la tumultuosa década mediática del artista cuenta con más de una hora de pop de lo más diverso temáticamente: baladas, rompepistas, sus imprescindibles temas de tipo pacifista/social, introspecciones y experimentos más o menos exitosos. Abriendo con la potente Unbreakable nos encontramos con una primera mitad romántica de todos los ritmos posibles, desde la devota Speechless hasta la brutal You Rock My World. El cambio de siglo queda patente como factor influyente en la tarea compositiva de Michael Jackson en Heartbreaker o Invincible de forma algo forzada, resultado de un viejo maestro que aún no logra danzar con total fluidez en los ritmos de la precoz era digital. Otros momentos como la neosoul Heaven Can Wait parecen haber absorbido con mayor notoriedad los flujos melódicos de un Justin Timberlake por aquel entonces joven pero ya influyente en su género.
El juego con las texturas informáticas y las alteraciones eléctricas de voz dan forma a un 2,000 Watts muy aplaudible. Modernidad sobre lo moderno (algo relamido, Michael) en un corte donde tenemos que fiarnos de que la voz que canta es la del astro de Gary, Indiana.
Dejando atrás otras baladas más o menos melancólicas como Don't Walk Away, Butterflies o la excelente You Are My Life llegamos al personal Privacy en la eterna batalla del creador de Thriller y propulsor del Moonwalking con la prensa del corazón que tanto daño hizo en vida (y vomitivamente también con posterioridad al 25 de Junio de 2009) al cantante estadounidense.
Invincible continua la estela de temas clásicos como Man In The Mirror o Heal The World con Cry, el mejor track de Michael Jackson en este siglo: infinita muestra de su compromiso (aquél que jamás abandonó) con la sociedad. En este caso, el mensaje se centra en la inyección de ánimo a una era plagada por la apatía y el egoísmo a la que flaco favor haría el inminente 11-S y, menos aún, todo lo que tras tal evento estaría por venir al mundo occidental. Cry es una linterna con la que encontrar la salida a un túnel sin aparente luz al final, un himno de optimismo y reconexión con la faceta solidaria que habíamos guardado en un polvoriento armario: "You can change the world, you can touch the sky you're the chosen one, if we all cry at the same time tonight". Hay cabida para el mensaje antibelicista en The Lost Children y las colaboraciones en Whatever Happens, una agridulce historia de amor y decepción acompañada por la guitarra de Carlos Santana .
Threatened, un guiño a Thriller, da cierre a la hora y cuarto de este LP. Una novedosa montaña rusa musical que no deja de explorar los conceptos clásicos que siempre interesaron al mítico Jackson.
Cry https://youtu.be/mj3MfUR35CM
You Are My Life https://youtu.be/2lnqRpK08do